La pesadilla de la SGM plasmada en la prensa mexicana (primera parte)

Generaciones completas eliminadas, ciudades enteras destruidas, aniquilación de sueños y anhelos, almas rotas y espíritus muertos que aún deambulan entre nosotros fueron los más terribles costos de la Segunda Guerra Mundial. Este evento no sólo marcó la historia, sino que quedó impregnado en la esencia de millones de personas; su recuerdo aún nos persigue, y aunque queramos olvidar, es de suma importancia que no lo hagamos, pues nos sirve para analizar los errores de nuestro pasado y no volverlos a cometer.

En este ejercicio del recuerdo, la prensa ha jugado un papel muy importante, pues uno siempre puede transportarse en tiempo y lugar para sumergirse en la perspectiva de las personas que lo vivieron en carne y hueso. Resulta interesante como la prensa de un país que no entró directamente a la guerra, en este caso México, pueda decirnos tanto de tan horrible suceso. Ya para 1939, en año en el que inició la pesadilla, la prensa mexicana empezaba a bombardear a sus lectores con información de contenido internacional. Una de las primera noticias la reveló el periódico ´El Informador´ del estado de Jalisco, donde se abordaba el tema de la invasión a Polonia por parte del ejército alemán y el peligro que Suiza corría: "En un momento dado, si el conflicto no acaba con la desmembración de Polonia, cuya ocupación está realizando el Ejército alemán a paso de gigante, la invulnerabilidad de las líneas Maginot francesas y Siegfried alemana puede convertir a la pequeña Suiza en la Bélgica de la nueva guerra¨. A su vez, la misma fuente nos proporciona otro artículo titulado ´Varsovia (1655-1939)´ donde se nos informa que ya para 1918 según los archivos de Poznam, los alemanes habían planeado destruir la nación polaca.Hoy en día, sabemos que la nación polaca sigue de pie y que la Alemania nazi no logró su destrucción. Sin embargo lo que sí fue destruido fue el espíritu de una nación entera; la población estaba hambrienta y sedienta, pero no sólo en el sentido fisiológico. La gente tenía un hambre insaciable de paz y una tremenda sed de justicia. La prensa advertía que el fin de la civilización estaba por llegar.

(continuará...)